Seguir la dieta de la sopa quema grasas durante siete días no sólo le da las verduras que necesita para una nutrición adecuada, sino que también le ayuda a quemar grasa para perder peso, y todo sin dejar de comer en la cantidad que le apetezca. Al igual que otras dietas de sopa, la dieta de la sopa de verduras quema grasas está orientada a la pérdida de peso.
¿Qué encontrarás aquí?
Empezar el plan
Justo cuando te sientas cansado de seguir muchas dietas infructuosas, que no cumplieron tus expectativas, puedes optar por el plan de siete días de la sopa quema grasas. En este plan, aunque su nombre no lo sugiera, hay días en los que hervir y comer carne.
En general, es un buen plan de dieta, que no aburre como otros similares.
Cuando se trata de quemar grasa, la dieta de la sopa durante siete días es una excelente opción, a la que darle una oportunidad. Para que lo sepas, la dieta de la sopa quema grasas nunca deja de sorprender en la variedad y la pérdida de peso, aun sin dejar de comer, es notoria.
En este artículo, introducimos la dieta semanal de la sopa quema grasas, enfocándonos en un plan de acción y menú para conseguir los mejores resultados en siete días.
Cómo estirar la dieta de la sopa quema grasas a una semana entera
Lo que hace a la dieta semanal de la sopa quema grasas atractiva es su plan conciso de alimentación, que permite conocer lo que ingeriremos con mucha antelación. Esto alivia la molestia de planear las comidas, lo que muchas veces es una lucha y un factor desestimulante.
Asimismo, el menú de alimentos que a continuación expondremos, demuestra que esta dieta proporciona más de lo que anticipamos por su nombre.
Menú semanal para una dieta de la sopa quema grasas
El menú de la dieta semanal que nos ocupa se divide en días separados, cada uno con sus propios grupos de alimentos, que debemos enfocarnos en comer.
Día 1
En el primer día comeremos sopa y frutas. La sopa podremos degustarla en la cantidad que nos apetezca. Sin embargo, esto no significa que no tenemos que establecer límites para la cantidad de alimentos que consumimos. Mantenernos bajo un 80 por ciento de lo que realmente podemos comer, siempre es una buena opción para no desarrollar tripita. Por ello, toda persona interesada en perder peso y mejorar su apariencia, debe desarrollar un sentido de lo que es bueno para su dieta y acorde a ello comer. Hagamos lo que hagamos, en esté día debemos mantenernos alejados de los plátanos.
Día 2
En el segundo día nos concentraremos en comer sopa con verduras, las que podemos comer incluso al vapor, es decir, semicrudas. Sólo debemos evitar freír con aceite.
En este día podemos añadir un poco más a la cena, como por ejemplo patatas o cualquier otro tubérculo funciona. La segunda jornada es la única en la que se nos permite comer patatas al horno que, en dependencia del método de preparación, tienen una concentración de 130 calorías por unidad.
Día 3
El tercer día se llena de sopa, frutas y verduras. Debemos evitar en esta jornada también los alimentos grasos cocinados con aceite, y los plátanos.
Día 4
En el cuarto día podemos comer esa fruta prohibida que son los plátanos, además de abundante sopa y 500 mililitros de leche desnatada y sin grasa. En la jornada podemos tener un plátano con cada comida, lo que significa que no debemos comer más de tres. Como es de esperar, un plátano no va a ser suficiente para saciar el apetito, pero ahí es donde entra en juego la sopa.
Tener un plato saludable de sopa nos pondrá al límite durante el tiempo suficiente para empujar los dolores del hambre a un lado.
Día 5
Esta jornada trae sorpresas pues es el momento de empezar a comer carne. Como es lógico, tras días comiendo solo verduras y frutas, nuestro cuerpo para este entonces sentirá los efectos de la falta de proteínas y grasas en nuestra dieta. De hecho, podemos sentirnos por momentos hasta un poco mareados.
Por ello necesitaremos conseguir para terminar bien el plan un poco de proteína animal y este quinto día es el ideal para hacerlo. El hecho de que sintamos que podemos tragarnos una vaca entera, tras la renuncia a comer carne durante cuatro días seguidos, no significa que no podamos mezclar la proteína con la sopa, que puede ser la que contenga carne, ya sea en forma de sopa de pollo o caldo de res.
Además, para obtener más proteína en nuestra dieta, comer tomates puede ser una buena idea, siempre y cuando la cantidad no exceda las seis unidades.
Día 6
En el sexto día volvemos de nuevo a la sopa, verduras y, más sorpresa, también habrá carne. En concreto, podemos comer en cualquier cantidad, pero sin volvernos locos y sentirnos mal por una indigesta. La cantidad de verduras que podemos comer no cambia, pero hay que recordar que se nos están prohibidas las patatas y debemos mantener el control hasta el último día.
Día 7
Una vez llegado el anhelado último día, podremos comer algunos carbohidratos. Esto significa que tendremos posibilidad de comer de nuestro pan preferido o tener un tazón de arroz. Además de tener presente nuevamente en la mesa los hidratos de carbono, podemos tomar también un poco de jugo natural, comer verduras y por supuesto, mucha sopa.
La sopa de verduras, debido al hecho de que es baja en calorías, es la base de todas las llamadas dietas de sopa. Comer sopa baja en calorías no sólo ayuda a reducir el consumo de calorías, sino que también permite satisfacer el apetito, sin que después tengamos que sentirnos culpables por comer más de la cuenta.
Las mejores sopas para dieta se dice que deben contener tomates, zanahorias, cebollas, pimientos verdes, repollo o apio. Cualquier sopa que contenga estos vegetales, debe agregarse a la lista de sopas que permiten perder peso tras siete días de dieta.
Para las mujeres con escalofríos de vez en cuando, tener un plato de sopa ayuda además al calentamiento del cuerpo, al aumentar la temperatura corporal y disparar el metabolismo. Aparte de esto, la sopa también es beneficiosa para la limpieza o desintoxicación del organismo.
A su vez, calentar el cuerpo mejora la circulación, lo que permite eliminar impurezas, como si se tratase de una limpieza natural.
Aspectos a tener siempre presentes
En cualquier dieta siempre hay cosas de las que cuidarse y aspectos a tener en cuenta para no pifiar en nuestras prácticas. Por ejemplo, se debe estar siempre al tanto de qué comer y qué no.
La dieta semanal de la sopa quema grasas no es diferente en este sentido. Por ello, a continuación compartimos una lista de precauciones que pueden ayudar a conseguir los objetivos previstos tras siete días de dieta.
- Mantente alejado de los dulces. Se supone que debes estar en una dieta, por lo que debes impedir que tu gusto por lo dulce arruine tu plan.
- Minimiza la cantidad de trigo que comes, disminuye al pan al mínimo posible y, sobre todo, olvídate de las cookies.
- Limita la cantidad de alcohol. Después de un día de beber debes esperar 24 horas antes de tener otra bebida, y lo mejor es no tomar bebidas alcohólicas mientras se está siguiendo una dieta.
- Hidrata tu cuerpo cuando sea necesario. Beber té, agua, café negro y jugos, solo 100 por ciento naturales y sin azúcar, pueden ser los mejores amigos para esto.
- Cuando desees repetir el ciclo de siete días para perder aún más peso, debes tener un impasse por los menos de dos jornadas, en los que te debes alimentar con normalidad.