Dieta depurativa

Una dieta depurativa puede ayudar a recuperarnos tras unos días de excesos. También es eficaz si nos encontramos especialmente cansados e hinchados. Una dieta depurativa sana y equilibrada puede ayudarnos a recuperar energía física y mental.

Cuando realizamos una dieta de este tipo lo que hacemos es darle un descanso a nuestro organismo y ayudar a que lleve a cabo ciertas funciones. Los órganos que se verán más favorecidos son los que están relacionados con la eliminación de toxinas de nuestro organismo. Es el caso del hígado, que además es el que sufre más las consecuencias de la acumulación de toxinas. Los riñones, los pulmones, los intestinos e incluso la piel, también se ven afectados.

Cómo seguir una dieta depurativa

Antes de comenzar una dieta de este tipo hay que plantearse si debemos realizarla. A quienes afirman que cualquier persona puede seguir una dieta e incluso recomiendan depurar el organismo al menos una vez al año. Sin embargo, siempre se aconseja seguir las recomendaciones de nuestro médico. Esto es especialmente importante si padecemos alguna enfermedad importante.

También hay que partir de la base de que es fundamental que la dieta que sigamos sea equilibrada. Aunque hay alimentos que funcionan mejor que otros, es importante buscar variación y comer en cantidades adecuadas. Si tenemos cualquier duda sobre la conveniencia de una determinada dieta, lo mejor es consultarlo con nuestro médico.

En cuanto a la duración de estas dietas, el rango es variable. Las dietas más largas son las que duran entre 10 y 15 días, y son las menos restrictivas. También podemos encontrar dietas de cerca de 7 días y otras de tan solo 3-5 días. En función de nuestras preferencias tendremos que buscar una dieta más larga pero menos restrictiva o una más corta pero más severa.

Objetivos y beneficios

 El objetivo fundamental de una dieta de este tipo es depurar el organismo y eliminar toxinas. Aunque de forma indirecta se puede lograr pérdida de peso, este no es el objetivo de una dieta depurativa. Si queremos perder algunos kilos lo mejor es realizar una dieta destinada a ello. De lo contrario, aunque llevar a cabo una dieta depurativa suponga pérdida de peso, podremos recuperarlo fácilmente. Esta circunstancia tendrá lugar especialmente si no llevamos a cabo un cambio de alimentación hacia hábitos de alimentación más acordes con nuestro organismo y que nos ayuden a controlar la línea.

De forma generalizada, los beneficios de una dieta depurativa son los siguientes:

• Reducir la retención de líquidos y con ello pérdida de volumen.
• Eliminar toxinas.
• Favorecer la absorción de minerales y de vitaminas.
• Mejorar el estado de nuestro sistema inmunológico.
• Aumentar la energía física y mental, así como reducir la sensación de cansancio y fatiga (aunque durante la dieta podemos sentir algo de flojedad).
• Favorecer que las digestiones sean menos pesadas.
• Conseguir una piel más limpia.

Hay un último beneficio que puede conseguirse tras seguir una dieta de este tipo: aprender y conseguir mejores hábitos de alimentación. Si nos sentimos bien tras realizar este tipo de dieta y vemos su eficacia, valoraremos continuar con una dieta más equilibrada. Esto tiene beneficios a largo plazo, ya que previene enfermedades y diversas patologías. Además, si somos creativos en la cocina, podemos incluso divertirnos creando menús y platos que favorezcan una mejor experiencia durante la dieta.

Alimentos desaconsejados en las dietas depurativas

Para que la dieta depurativa sea más eficaz debemos evitar la sal y el azúcar y todos los productos que puedan contenerlas en exceso. Es el caso de las bebidas con azúcares añadidos, así como los alimentos envasados y procesados. También es importante evitar las bebidas con alcohol o con gas.

Sin duda, respecto a las carnes y pescados, hay que evitar el consumo de proteína animal rica en grasa, como los pescados azules y la carne roja. En cuanto a la forma de cocinar, evitaremos las cosas rebozadas, fritas y con salsas.

Aunque estos alimentos desaconsejados se refieren al momento de realizar la dieta, su consumo ha de ser moderado en la dieta habitual. Además, la vuelta a ellos tras realizar la dieta debe ser paulatina, no brusca.

Qué comer durante una dieta para depurar

Los alimentos destacados durante estas dietas son las frutas, las verduras y los cereales. Según el tipo de fruta lo mejor es comerlas con piel y con pulpa en los diferentes casos. En cuanto a las verduras, se recomienda tomarlas frescas y cocinarlas al vapor, para que pierdan menos nutrientes. Y respecto a los cereales, para este tipo de dietas es preferible que sean integrales. Esto permite que además de ayudar a las funciones de los intestinos, sacian el apetito.

• Frutas: manzana, cítricos, pera, kiwi, piña y granada.

La manzana es sin duda la mejor opción para eliminar toxinas. Además, ayuda a reducir el nivel de colesterol y a regular las funciones digestivas. También contiene fibra, por lo que reduce la sensación de hambre.

• Verduras: espárragos, calabacines, apio, tomate, alcachofa y cardo.

Los espárragos trigueros son unos excelentes aliados para que la dieta sea nutritiva, ya que tienen minerales, como el potasio y el calcio. También tienen varias vitaminas del grupo B, así cómo vitaminas que antioxidantes como la A y la E.

Podemos destacar igualmente los beneficios del apio en una dieta depurativa, ya que ayuda en las digestiones y es muy útil para eliminar toxinas. También contiene vitamina C.

En cuanto al tomate, además de ayudar al sistema inmunitario, favorece la protección de la piel de los efectos nocivos del sol. Además, tiene muy pocas calorías.

La alcachofa está siempre presente en dietas depurativas, gracias a su gran efecto contra la retención de líquidos. También es fundamental para depurar el hígado. Por si fuera poco, ayuda a realizar una mejor digestión y favorece el movimiento intestinal. Además, al reducir la acumulación de toxinas en el hígado, previene los cálculos biliares.

• Cereales: en este tipo de dietas son fundamentales por su aporte de energía y porque limpian el intestino. Asimismo, absorben toxinas y previenen el estreñimiento. Hay que acordarse siempre de escogerlos en su versión integral.
• Lácteos: los yogures ayudan a luchar contra las bacterias que nos perjudican y favorecen las que son beneficiosas para nuestro organismo. De este modo, equilibran la flora intestinal. En cuanto a la leche, lo mejor es que tenga poca grasa. Y respecto a los quesos, que sean frescos.
• Carnes: las que mejor nos ayudarán a que nuestra dieta depurativa sea eficaz son las carnes de pollo, pavo y conejo. Recordemos que las carnes rojas están desaconsejadas.
• Pescados: la lubina, el salmón y la merluza nos ayudarán a cumplir nuestros objetivos. No hay que olvidar que los pescados azules son los que no se recomiendan.
• Agua e infusiones: beber abundante líquido es fundamental para que realizar esta dieta suponga eliminar toxinas. Como ejemplo de infusiones se puede tomar té verde o té blanco. Si no queremos tomar teína, el rooibos es una buena alternativa. En cuanto al agua, además de tomarla sola se le puede añadir algo de limón u otra fruta.

Un menú de ejemplo

El menú para un día de dieta depende de la duración que vaya a tener nuestra dieta depurativa. El siguiente ejemplo es el del menú de 1 día de una dieta de 2 semanas.

• Desayuno: para empezar el día podemos tomar leche de avena con copos de avena. Como pieza de fruta podemos tomar naranja, en zumo. Para incluir algo más de líquido podemos tomar un rooibos con canela.
• Media mañana: un yogur y una granada.
• Comida: de primero podemos tomar arroz con espárragos trigueros y a continuación pechuga de pavo con ciruelas.
• Merienda: un puñado de frutos secos y pan de muesli.
• Cena: ensalada de escarola con endivias y queso fresco. A continuación, filetes de mero al vino. Podemos acompañarlo de una rebanada de pan integral. De postre, compota de manzana (mejor si la elaboramos en casa y controlamos la cantidad de azúcar).